El proyecto.

Esto lo escribí hace más de medio año, para un proyecto de un curso llamado 'procesos creativos', en el cual debía escribir sobre algo abstracto que le regalaría a alguien si fuese la única oportunidad que pudiese darle algo a esa persona querida. Justo en ese tiempo perdí a alguien que significaba mucho para mí, en realidad, significa mucho hasta ahora, por lo cual, escogí la amistad. El proyecto fue muy bueno, comenzaba con una dedicatoria, una carta, cosas relacionadas al regalo y fotografías hechas por mí (algún día las pondré acá, solo debo encontrar el CD donde las grabé, ja, ja, y eso que soy maniática del orden, pero tengo miles de CDs con fotografías). Acá redacto la carta nuevamente... Solo en la amistad creo que existe el amor, de ahí, NO, ja, ja, raro de una mujer, ¿no?

¿Qué es la amistad? Y me lo pregunto pensando y pensando mil veces, dando vueltas en mi cabeza para tratar de encontrar la mejor respuesta a mi incógnita-y creo, que incógnita para muchos, también. Y me digo a mi misma, 'no seas ingenua', la amistad es el mejor regalo que le otorgas con todo tu amor a esa persona tan valiosa para ti.

La amistad es ese sentimiento abstracto tan bello y hermoso, hermoso total, que no puede verse ni tocarse, pero sí lo puedes sentir, si es que tu corazón y alma están abiertos al amor puro.

Esta relación se da entre personas de pasados y trasfondos disímiles, ya que se complementan el uno con el otro; a veces podrás decirle a un buen amigo, '¿por qué no llegaste antes a mi vida?', pero si esa persona hubiese llegado antes de tiempo, quizá no serían amigos ahora, ya que todo el pasado, problemas y anécdotas de uno son los que hacen a uno como actualmente es, como esa persona que uno tanto quiere, con todos sus defectos y virtudes. y enseñanzas que obtuvo a través de sus años de vida, por más que sean pocos.

Los sabios y poetas de todos los tiempos han exaltado siempre la amistad. Para los filósofos griegos, expresa virtud. Aristóteles menciona tres tipos de amistad: por interés, por placer y por le bien; pero solo la que surge del bien merece llamarse verdadera amistad. Para Cicerón y Séneca, la amistad implica armonía, buena voluntad y afecto.

La amistad no puede ser descrita ni por la misma RAE, que tan solo dice que es el 'afecto personal, suro, desinteresado, compartido con otra persona, que nace y se fortalece con el trato', pero, para mí, es mucho más complejo; la amistad es una de las relaciones humanas más hermosas, la cual puedes formar en cualquier etapa de tu vida, pero, que sin duda alguna, la mejor, verdadera y pura que encontrarás será la que puedas formar desde pequeño, desde la infancia o adolescencia, pues, los niños siempre se muestran sinceros, de la verdadera forma que son, sin hipocrecías ni caretas, sin tratar de parecer alguien que no son; con aquellas tardes de juego en la arena, pintar con crayones, jugar a las escondidas, etc.; igualmente, puedes obtener muy buenos amigos de muchas partes, sin importar de donde son, o su edad, ya que, la amistad no clasifica por cosa alguna, ni por la etnia, religión, tez, género, elección sexual, opción política, etc., y mucho menos por tu nivel socioeconómico; pues, agrupar a las personas en distintos grupos es lo más irrelevante cuando se trata de hacer amigos.

Con tus verdaderos amigos compartes todo, gustos, opiniones, aficiones. Te sientes a gusto, conversas, compartes momentos, que pueden parecer mínimos, pero son infinitos para el alma, pues brindas alegría.

No importan los kilómetros o millas a los cuales estén ubicadas esas personas, pues el amor que existe entre amigos traspasa fronteras, y a pesar de la distancia, los que son amigos verdaderos siguen pasando instantes gratos, ya sea por teléfono, messenger, facebook o por una simple carta, que al leerla te causará automáticamente sonrisas decorosas y te trae a la mente aquellos momentos que guardabas en la parte sagrada de tu mente.

En este bello sentimiento solo cuenta tu alma, corazón y mente honestas, no te importará como luce aquella persona, solo te interesará ver su verdadero yo, su sonrisa sincera, no aquella lúgubre sonrisa esquinada, como esquivando la verdadera sonrisa, una sonrisa resguardada que se resiste (valga la redundancia).

Cultivamos la amistad no solo con nuestros congéneres, sino, también con el sexo opuesto. Y no por ello significa que uno está enamorado de aquella persona, en el sentido romántico del amor; claro que a veces se de el caso en que un amigo se enamora de su amiga, o viceversa. Pero, también se da, que la amistad puede unir con amor a dos personas, sin que alguno de los dos sienta una atracción física por el otro; por esto a veces se dice que la amistad es amor del más puro. Casi siempre uno termina enamorándose del mejor amigo, el inseparable de toda la vida, ese amigo que es tu confidente incondicional, en infaltable en tus penas y alegrías, tu pañuelo de consuelo frente a una tragedia, el que está a tu lado en la diversión, juego, broma y risas, pero, también, cuando ocurre un problema, tal cual dice el dicho 'al amigo se le llama para contarle una buena nueva, pero aparece de sopresa, cuando la desgracia nos ronda'.

Se habla de amor, ya que la amistad es justamente aquello. Uno ama a su amigo, por el cual estaría dispuesto a sacrificar la vida, por él o ella.

En la amistad surgen diversos comportamientos; también existe respeto, simpatía, cariño, compañerismo, tolerancia, afinidad de pensamientos y valores. Pero, sobretodo, la amistad es una relación, en la cual hay que trabajar, no basta con señalar que uno es amigo de otra persona. La amistad es todo lo contrario, es dedicarse a esa otra persona, es cultivar todo ese amor, destinarle tiempo, para saber de ella, como está, cuales son sus sueños, aspiraciones y anhelos. Es preocupación y compromiso. Es saber escuchar y querer ser escuchado.

Pero, hay una cosa clara, cuando uno conoce a una persona, se siente algo especial, en la medida que creamos que vamos llegando al punto más elevado de la amistad. Existe ese sentimiento abstracto que proviene del alma, ya que entre amigos existe una clara atracción espiritual (sin ir al punto religioso-vale recalcar-).

La amistad no se fuerza, se da de manera gratuita.

Lo peor que puede pasar en esto, es perder a un amigo, es tan doloroso, tan hiriente-sobretodo si lo pierdes en vida, ¿me dejo entender?-. Tal cual me sucedió una vez-y en verdad jamás se lo desearía a persona alguna-, días intensos de lágrimas imparables. Lo más atroz que te podría ocurrir. Como quisiera volver a recuperar aquella amistad, que yo consideraba verdadera; me duele recordar como perdí a aquel amigo, o mejor dicho, como el me perdió. Sin él, una gran parte de mí está vacía, rota, sin vida, congelada, triste total. Sin duda alguna, perder una amigo duele mucho, pero siempre seguirás amando a esa persona con la que compartiste tantos momentos, tantas risas, tanta diversión; podrás llorar de rabia porque quieres retroceder el tiempo para que aquella razón de enemistad nunca haya sucedido, quisieras cambiar todo, y te sientes impotente de no poder hacerlo, y te sientes impotente de no poder hacerlo, y tienes miedo de acercarte a aquella persona, por temor a que te dirá o si te herirá nuevamente; y miras las fotos que tienes con él, aquellas fotos que salen alegres, felices, con sonrisas de oreja a oreja, con abrazos eternos y sinceros, y sollozas, aquella foto en la cual le das un beso sincero lleno de amor, y no puedes dejar de lamentarte la falta de ese amigo puro; pero, a pesar de todo lo que haya podido suceder, siempre esa persona sabrá que nadie podrá ocupar ese lugar que él ocupó en tu mente, y así se hayan alejado, cuando esa persona necesite algo, sin pensarlo irás donde ella, y harás de todo porque sea feliz, muy, muy feliz, y si necesita de ti, sin duda, recibirás a ese amigo cn los brazos extendidos y una sonrisa.

La amistad es el sentimiento más complejo, el más hermoso en toda la complejidad del universo, y de todos los universos existentes, es la infinitud del amor.

El amigo de verdad no te cambia, como dice la canción de Arjona 'si me gustaste por ser libre, ¿quién soy yo para cambiarte?', o en otra estrofa 'el problema no es cambiarte, el problema es que no quiero', pues, el amigo te ama tal cual eres, con todos tus defectos, acepta tus errores, y aprende de ellos junto contigo, te ama desde lo más profundo de su ser, se muestra espontáneo contigo y demuestra ese amor existente sin importarle el que dirán.

La amistad es esa emoción que incluye todos aquellos sentimientos perennes; la libertad, la salud, la alegría, la felicidad, la sinceridad, la lealtad, la honestidad, la confianza, la complicidad, el desinterés, y sobretodo el amor... El amor eterno.